domingo, 18 de mayo de 2014

ELECCIONES EUROPEAS, DEMOCRACIA Y BIPARTIDISMO

Me preocupa el elevado porcentaje de abstención que reflejan las encuestas de cara a estas elecciones europeas, un porcentaje cercano al 60%. Naturalmente es una opción política libre respetable como cualquier otra, pero en ocasiones como esta, puede estar partiendo de premisas equivocadas, esencialmente que estas elecciones son irrelevantes.

Mucha gente piensa que no hay trascendencia en las decisiones de la Unión Europea. Nada más lejos de la realidad. Son muchas las normas que emanan de las instituciones de la Unión Europea y que son adaptadas en nuestra normativa, es decir, que nuestra normativa está muy condicionada por las decisiones tomadas en dicho plano. Del mismo modo, cada vez tiene mayor repercusión las decisiones del Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Es importante lo que se decide en plano europeo. Y hablo solo desde el plano jurídico. En el plano económico lo vemos desde hace unos años.

Pero hay una importante cuestión política. Si algo se ha destapado claramente es la crisis de nuestro sistema de partidos políticos, siendo cada vez más las voces que claman por un sistema de mayor representatividad y que no favorezca el bipartidismo. Los males del bipartidismo son evidentes, y lo que conocemos es solo la punta del iceberg: desde la corrupción a atender a otros intereses que no son los de los ciudadanos. Como efecto colateral una desgana y desinterés de los ciudadanos por la política, el enturbamiento de la misma, y por tanto la desafección generalizada. Ello supone un grave peligro para un sistema democrático.

La llave de la modificación de este sistema de representación está en los mayores beneficiados por el mismo, por lo que es altamente improbable que decidan cambiarlo. Debemos ser los ciudadanos los que demos el empujón definitivo y no entienden otro mensaje que el de las urnas.

Por eso es muy importante que en estas elecciones haya una buena participación y que no se vote a quienes representan el bipartidismo. Elijamos las opciones que mejor nos representan, o si alguien quiere seguir el denominado voto "util" que vote a uno de los dos partidos no mayoritarios bipartidistas con mejores expectativas de voto.

Si uno de esos partidos bipartidistas no fuera uno de los dos partidos más votados, entendería perfectamente el mensaje.

La abstención en este caso, favorece y ayuda al bipartidismo. Y lo saben. Vaya si lo saben.

2 comentarios:

  1. Discrepo. Una alta abstención es lo único que puede deslegitimar el sistema. Hay una Red importante de clientelismo en España que siempre ira a votar y si hace falta, pactarán entre ellos pp y psoe. Poco o nada se puede hacer dentro de un sistema ideado para que no cambie nada. La abstención es una buena idea, también el voto a minoritarios es una opción, pero estos minoritarios están dispersos, jamás podrán competir con la estructura de clientelismo y poder de los grandes. La abstención es la única fórmula de deslegitimar todo este chiringuito que esta arruinando las expectativas de vida de los españoles.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El sistema se deslegitima el mismo día a día. La abstención solo sustenta el reparto electoral y el bipartidismo

      Eliminar